En el extremo sur de la calle Las Damas, contiguo al terreno de la Fortaleza, hay un parque en el que abunda la naturaleza y destaca el color rosa en balaustradas y muros. Esta “huerta” de la Ciudad Colonial es el Parque Pellerano Castro, conocido como Parque Rosado y también Parque de los Poetas. Raquel Casares, presidenta de la Asociación de Propietarios y Vecinos de la Ciudad Colonial, quien junto al alcalde del Distrito Nacional rescataron la plaza de los suburbios y la mantienen, me lleva a visitarla. (Tuvieron aportes de la Cooperación Alemana al Desarrollo).
Nos esperan varios voluntarios que trabajan bajo el lema “Plantando vida para cosechar comunidad”: Raquel Fiallo, Chantal de Campos Navarro y el paisajista y biólogo Adolph Gottschalk. Señalan especies autóctonas y endémicas plantadas para recuperar zonas verdes, convertirlas en jardín para atraer zumbadores, pájaros e insectos para polinizar, además de “conseguir recursos en esta generación, pero sin afectar a la siguiente y favorecer la biodiversidad”. ”, dice Gottschalk.
Los miembros de APRECC ayudan de diferentes maneras. Por ejemplo: Raúl Brache donó el roble amarillo; El ingeniero agrónomo Antonio Alfau reproduce plantas cedidas por el Jardín Botánico: Tino Deon es “jardinero”, le veo llegar con una bolsa de abono que esparce por el suelo… Esta plaza con una pequeña zona de juegos infantiles hecha con elementos orgánicos es, “En la Ciudad Colonial el único parque con juegos infantiles”, dice Raquel. La plaza, de forma triangular y con alcobas, fue diseñada por el arquitecto Doy Gautier, quien estuvo a cargo de la remodelación. Sus bancas semicirculares fomentan la socialización y sirven de relajación para quienes en la Zona Colonial buscan un lugar para sentarse al aire libre.
Entre estos, quienes desayunan o almuerzan en D’Comer Colonial, o ingresan al Colmado Omar que funciona enfrente (donde confluyen las calles José Gabriel García y Arzobispo Portes); y los clientes del hotel Studio 27 Colonial, en la calle Isabel la Católica. “Contribuimos al desarrollo turístico”, afirma Casares. (Las fotos de APRECC fueron proporcionadas para este artículo en Listín Diario).
Nombre
La plaza lleva el nombre de Arturo Pellerano Castro, un poeta dominicano apodado Byron. “Modernista y bohemio, dedicó poemas a la naturaleza, las costumbres populares y la vida rural”. En el parque, con un busto (ahora en restauración) de la poeta puertorriqueña Julia de Burgos, intelectuales y artistas realizan actividades culturales.